Hoy estuve conversando con mi prima, que se va a Satipo
el 20 de Julio. Entre mucha de las cosas que hablamos, me dijo que le
daba miedo el viaje, porque no sabía si podría morir o no, si le picaba
algún bicho o animal extraño y podría morir y no volverme a ver. Le he
restado importancia a lo que me dijo, sólo por el hecho de que hasta en
ese momento no había pensado en qué cosa es lo que realmente puede
pasarnos a cada uno de nosotros si es que no se cuenta con una bola de
cristal para predecir nuestro propio futuro.
Así que eme
aquí,
escribiéndote en medio de la madrugada antes de partir de viaje (qué
solo durará el fin de semana) y que según mi mecenas (Sarita), se lo
pagaré siendo su fotógrafa oficial.
Muero de sueño, pero siento la necesidad de escribir, aunque sea "algo".
Mi bitácora de viaje, no está bien definida. Sólo sé que me llamarán para coordinar mañana mismo. Por el momento, creo que es hora de ir a domir.
1 comentario:
Pensar en la muerte, es tan raro pero supongo que el miedo a lo desconocido es lo que nos lleva a ese tipo de pensamiento. Como suelen decir: deberiamos vivir cada dia como si fuera el ultimo aun asi es dificil. L.L.
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